y voluntariamente cautivo,
apresado al recuerdo
de la piel ardiente que te invoca,
atrapado al latido
que quebranta el eco de mi pecho.
No te quiero… sujeto,
sino libertado,
y voluntariamente preso,
eternamente encarcelado
a la ojos encendidos que te extrañan,
atrapado en el tacto
que fractura el anhelo de mis dedos.
Te quiero… librado,
y voluntariamente reo,
esposado al mudo secreto
de la voz que te nombra,
atrapado al borde del añorado beso
que astilla mi boca.
Te quiero… voz
música, verso,
así sentirte… sólo viento
apenas un leve roce
que acaricia mi pelo.
Te quiero… silencio,
callado , mudo,
así sentirte… dormido deseo
que abraza mi cuerpo..
Te quiero…realidad,
y bello espejismo,
dulce utopía,
hermoso sueño…
Así, mi amor lejano,
amor de ayer,
amor de nunca,
así, tú serás libre ,
también serás mi reo.
Envolveré tu nombre
de veladas ternuras,
de nublados recuerdos
y te llevaré siempre,
libremente atrapado,
dolorosamente eterno.
(Elvira Molina Almoguera)
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